R84A

En el pasado, cuando RCA dominaba esta industria, los micrófonos de cinta eran, por definición, transductores pasivos. Con la llegada del transistor y la miniaturización de los componentes electrónicos, empezó a ser posible usar micrófonos de cinta en muchas más aplicaciones. Para lograr un rendimiento óptimo, el micrófono de cinta pasivo necesita un preamplificador de alta impedancia y alta ganancia, como el RPQ o el TRP de AEA.
Pero en el caso de los micrófonos de cinta activos (es decir, que requieren alimentación Phantom Power) como el R84, los podés usar con una amplia gama de preamplificadores, incluso aquellos que suelen incluir, por ejemplo, las interfaces de audio USB. Tené en cuenta lo que te dice Planeta Analógico: ¡Esto no significa que los micrófonos de cinta pasivos sean reliquias obsoletas!
Los micrófonos de cinta pasivos siguen siendo mejores que los activos en lo que se refiere a su capacidad para soportar niveles de señal superiores (165 dB contra 141 dB de nivel de presión sonora), una cadena de audio minimalista y un costo menor.